martes, 11 de noviembre de 2008
El Diablo ante el espejo
El hombre se creía Angel bueno
y confiado en ver sus alas
se miró un día ante el espejo.
La imagen que devolvió el reflejo
le causó pavor y sensación rara:
manto negro donde creyó ver alas
y por la piel y por la boca volcanes de fuego.
- ¿ Dónde está el Angel ? – Se dijo -
¿Y por qué me encuentro en el umbral del Infierno?
"No te asombres, hombre, siempre sucede,
solo que casi nunca conviene,
descubrir que llevamos dentro,
junto con el Cielo, el Infierno.
Ni el ángel es tan Angel
porque se cree bueno,
ni el Diablo lo es tanto
porque se sabe malo.
Todos llevamos dentro
junto con el Angel al Diablo.
Teme al ángel en su camino
cuando del diablo este se olvida,
las bajas pasiones están donde mismo,
solo que a veces permanecen dormidas.
El hombre no es bueno
porque en su camino lo acompañe un ángel,
ni es malo porque en algún momento
se le aparezca el diablo.
De hombres ángeles,
de ángeles hombres
y de ángeles diablos
está el mundo hecho.
De ángeles, de diablos, de hombres.
No te inquiete descubrir si en algún momento
has sido diablo.
Teme mucho cuando de ángel presumas
y te olvides del hombre que llevas dentro".
¡ Pobre del hombre que solo ve alas
cuando se mira ante el espejo !
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1 comentario:
hy prod to be your friend.^_^
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