Una paloma huérfana de palomar
quería construir un nido de flores.
Buscaba las más hermosas en su afán
- la peregrina no sabía-
que hay flores bendecidas.
Vio una, sostén de la rama seca,
su pico victorioso fue una estocada
en el bastón del tallo,
la rama sucumbió entre la hojarasca.
-¿Por qué, Paloma, por qué
-suspira la rama deshecha-
descubriste la florecilla
que me mantenía enhiesta?
En el efímero nido
tiembla de frío la violeta
mientras la rama muerta
sonríe desde su tisteza.
1 comentario:
hyyy... ^^ do you remember me..
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